porque somos imperfectos.
Dolemos
por que fracasamos,
por que nos frustramos,
por que nos desengañamos.
Y en el silencio de nuestra profunda soledad
descansan nuestras pesadillas cansadas de llorar nuestra indiferencia.
pero las pesadillas duermen poco,
se recuperan rápido y
se levantan pronto.
Dolemos
en nuestras obligadas ausencias,
y con cada despedida nos lamemos las heridas.
Dolemos
cuando lloramos,
cuando reímos.
Dolemos
por que existimos.
Dolemos
por que morimos.
Y dolemos porque sentimos. Quizás eso también sea importante, no crees?
ResponderEliminarMe ha gustado mucho mucho.
Un abrazo.
Excelente poema, Hayuni, es profundo... llega a doler.
ResponderEliminarUn beso.
Humberto.
Muy hermoso lo que escribes....
ResponderEliminarLo realmente paradójico es pensar que si no dolemos...no seríamos nosotros mismos...
Gracias por pasarte. Desde hoy tienes una nueva seguidora...
un beso