jueves, 9 de junio de 2011

Disculpen la tristeza, ayer me visito un tigre.



Y ese hombre tan cambiante, tan etéreo como constante y solido, tan real por sus propios méritos como por los méritos de quien al amarlo, lo inventa 



Crúzate conmigo en los pasillos del sueño.
Calma la lluvia de mis ojos con el sol de tu sonrisa.

Arrúllame con el arco iris de tus abrazos,
 Ponle color a las nubes de mi melancolía.

Has de las ofensas dichas una canción de mar,
Cántala con la voz de tu alma.

Hazme una cama en la constelación de tu cuerpo,
Cúrame y abrázame con tus alas de ángel.

Regálame la serenidad de tus ojos a mi corazón intranquilo.

Cuéntame un cuento,
que sea el del Principito,
Y dime que las rosas no tenemos espinas por pura maldad,
Dime que las tenemos para protegernos de los tigres.  
  

martes, 7 de junio de 2011

Ámame cuando menos me lo merezco, porque es cuando más lo necesito.

Estás sólo a la mitad después
Del punto del olvido
El reloj de arena en la mesa
La caminata antes de correr
El respiro antes del beso
Y el miedo antes de la llama
¿Alguna vez te has sentido así?


¿Alguna vez te has odiado
Por mirar fijamente el teléfono?
Tu vida entera a la espera que suene
Para probar que no estás sola
¿Alguna vez has sido tocada
Tan suavemente que tuviste que llorar?
¿Alguna vez has invitado
A un extraño a pasar?



Historia 

Un perrito es atropellado por un auto. Dos amigos pasan
caminando y presencian el accidente. Uno de los dos se
acerca a levantar al animal para llevarlo a un veterinario.
Cuando intenta sujetarlo, el perrito lo muerde.
El hombre lo suelta y se queja con su amigo:
—Perro desagradecido, lo quiero ayudar y me muerde…
El amigo contesta:
—No te enojes. No te muerde por falta de gratitud, te
muerde porque está herido. 
Jorge Bucay 




 Todos amamos como podemos, porque todos estamos heridos.
El trabajo es amarnos como somos y querer a los otros como son, 
aceptando el amor que pueden darnos, porque ellos
también han sido lastimados.